viernes

El arroyo





Es arroyo porque las aguas arrollan las piedras a su paso como la crisis empuja las gentes al paro. La corriente todo lo arrastra inexorable y va cogiendo fuerza en el camino. Hablamos del deshielo. Buscando en el inconsciente colectivo la transformación sin perder la propia naturaleza. De repente cambian las condiciones ambientales. Reinventarse, otra vez.  La nieve deshaciéndose tiene parangón emocional en la ruptura de sistemas, de relaciones, de alianzas, de contratos, de confianzas, en los esquemas deshaciéndose poco a poco pero de repente ya son otra cosa, cuando se funden uno detrás de otro para dar paso a una nueva comprensión ante una situación sorprendente, inesperada. Somos agua y fluimos cuesta abajo. Nunca aprendimos demasiado bien la lección de la resignación.


Licencia de Creative Commons

El deshielo



Acuden a mí inmediatamente los arquetipos mientras observo el agua fluir desde las cumbres inmaculadas. La lenta pero inexorable transformación del elemento más preciado, que pronto va a perder su estado níveo para dar luz a las gotas que se suceden a cada tramo, se juntan, revolotean y buscan su camino alrededor de las piedras para correr de la mano pendiente abajo, aún siéndolo, es más, mucho más que simple deshielo.

Medito alrededor de los significados del nombre del fenómeno. De forma inmediata el deshielo representa  vida para las tierras y el sustento para los seres que habitan los prados que ya verdean; pero aquí en lo alto, la actividad en el bosque sólo se revela ante el propio silencio: un aleteo, un trino, unos gorjeos contestados desde mi propia voz y respondidos después desde las copas más lejanas. Todo el resto es silencio, nada vive todavía, nada visible. La soledad se hace más profunda.



sábado

Yo lo sé



Sólo si pudiera narrarte
la belleza de lo que ví.

La inmensidad del mar, 
lo minúsculo que me sentía.


Vinieron a mí, lo sé
Mi mirada vagaba perdida
entre una ola y la siguiente
mecida por las cuerdas de tu guitarra

Siempre es tarde, sonaba,
las ondulaciones se iban sucediendo
mientras yo las miraba pensando

Salió de las profundidades
y su saludo tuvo el poder suficiente
para hacerme inmensamente feliz.

No hay fumarola más blanca
ni ola más obscura en el mar
Ni soledad más profunda
que la existencial.








Licencia de Creative Commons










martes

Treballant



¡Enfeinats! Aquí se trabaja de lo lindo, estamos siempre atareados, esto es una cadena, un no parar. No hay crisis ni pollas para esto. A producir a toda máquina, que no nos vean estar quietos, que no podemos. Una arenga primaveral: en pie y vamos a dar ejemplo de actividad. Por fin se huele el calorcito, la cercanía de la temporada, la inminencia de la apertura. Estamos en pleno despliegue  de actividad. Trabajando, trabajando, sudando, sudando, yendo, viniendo, estresándonos, divirtiéndonos. El dedo índice y el corazón secándose la frente, el pulgar acariciando el labio por su punto medio. La de cosas que hay para hacer, me encanta hacerme una lista e ir tachando cada día lo conseguido. Hoy he tachado siete, ocho, ¡nueve! Me encanta, me encanta tener para hacer miles de cosas y hacerlas a la vez o sucesivamente, no, yo las hago a la vez. Trabajando con las manos.

Atareados para abrir el negocio cuanto antes, instalando las recién adquiridas piezas, pintando los desperfectos, limpiando detrás de cada industrial que se va, repasando todos los aparatos a ver si funcionan por si acaso, negociando precios con los tenderos, haciendo los pedidos, eligiendo género, calibrando personalidades y habilidades y finalmente contratando personal, ay, las compras, siempre peleándose por un euro..., decorando con lo que sea bonito y barato, todo con prisa, todo ha de quedar listo para ayer. A resolutiva, no me gana nadie, ¿quizá tu? 

En plena limpieza primaveral. En la oficina y también en casa, que ya toca. Quitamos el polvo y las telarañas de las alturas, del alma y de los rincones. Vaciamos y arreglamos los armarios para hacer sitio. Las cosas que no sirven, las tiramos fuera, fuera, ha de caber lo nuevo, ha de quedar espacio disponible. Los papeles, los ordenamos, es un lío pero necesario, vital. Los inútiles, los rompemos, los lanzamos. Nos deshacemos de todo lo que no importa. Adiós.

Punto aparte para mis flores; tierra nueva para dos de mis preferidas; para mi princesa, compré un tiesto precioso y carísimo que ocupa un lugar de privilegio en mi salón; abono para todas a discreción, agua y mucha agua y cariño.... Y las más bonitas de todas las flores del mundo para mí, las plantas que he visto nacer, crecer y vivir todo el año, gestando la maravillosa explosión de estos días.... ¡qué me gustan y me complace el verlas cada mañana!

Ni quiero ni hablar de la criba de la ropa; la que ya no nos vale, de la que ya no nos pondremos nunca, de la talla que nunca volveremos a usar, de la pasada de moda que nunca volverá, podría hablar años, pero diré que la tiramos o la plegamos y guardamos. Yo la regalo a las personas que la utilizarán de nuevo. Pero hay excepciones, porque a mí siempre me ha gustado jugar con los retales a las modistas, me gusta transformarla y darle una última utilidad en forma de labor de costura.

Así voy reciclando telas e hilos, haciendo mil manualidades, tejiendo jerseys, cortando pedacitos de tela, cosiendo botones, creando formas, acolchando corazones y flores, dulce el sonido del papel manila y yo jaboncillo en mano, hilvanando y probando, me pinché con un alfiler y una perla roja me recuerda que una vez soñé con una princesa costurera...

Y así va pasando la primavera.....

Imprevisibles









Los elementos y yo

imprevisibles, irresistibles, me rindo, 

en ellos me miro, en ellos medito.

Después de la tormenta viene la calma.

Calma



Come away with me, Norah Jones


viernes

¿Tú crees en las casualidades?



¿Os acordáis del gato negro del post del poema? Siempre anda por aquí. Será una casualidad, pero no soy supersticiosa. Si me diera mala suerte cada vez que me cruzo con él, ya me habría muerto hace tiempo, pobre bicho, él no tiene la culpa de ser tan odiado en el barrio. Bueno, pues aquí de nuevo el guapo gato negro observando la puesta de sol, ya veis que le he cambiado el adjetivo... Yo creo que se ha comido el césped. Bueno, da igual el césped, yo todavía no me lo he comido a él.

Hablando de casualidades, una pregunta quiero hacerte, ¿tú crees en las casualidades? Esas cosas que pasan que parecen cosa de magia y que van marcando tu vida con una serie de coincidencias temporales acausales que van determinando qué camino vas siguiendo, o qué elecciones vas haciendo en cada momento determinado, ¿sabes a lo que me refiero? Pues eso. Hay mucha gente que les llama causalidades, no casualidades. Es decir, que piensan que todo tiene una razón de ser, algo previo, como si el universo o el destino o dios se aliara para favorecerte las cosas a tí. A mí me parece un poco pretencioso pensar que el universo está pendiente de mí, hay cosas de esta forma de pensar que me parecen bien, pero con este universo tan inmenso donde la tierra apenas es un grano de polvo yo debo ser poco menos que nada, pero supongo que si lo creyera viviría más feliz y confiada, qué le vamos a hacer, no me fío de nada salvo de mi misma.

Volvamos a las coincidencias temporales sin causa conocida, yo sí que creo. Dos cosas que coinciden en el tiempo, en el mismo momento sin que sepamos por qué.  A mí me pasa muy frecuentemente. Y es raro, raro. son cosas de las que no puedo sustraerme. En el fondo me gustan. Disfruto de ellas. Es tremenda la sensación de necesitar algo y encontrártelo acto seguido aunque no lo vayas buscando. Es pensar en una persona, o simplemente necesitarla, y te la encuentras. Es necesitar un empujón un día determinado y de repente viene, o te llama una amiga y te da un aliento, un sentido a todo, una patadita por el culo, unas risas... también. Mis queridas amigas. Esto es lo mejor de todo.

Dicen que una persona se mide por la calidad de sus enemigos. Si es esto verdad, también lo es a sensu contrario, por la calidad de sus amigos. Yo tengo de todo, gracias a dios calidad es lo que no me falta, y sobre todo, grandes y profundas amistades.

Hay teorías que dicen que uno debe de ir dirigido hacia un objetivo, que lo principal es tener marcado el plan de vida, y que todos nuestros pasitos nos conduzcan hacia donde queremos ir. Otros, sin embargo, se relajan a la vida y deja que fluya a su alrededor libremente, sin un camino marcado de antemano, vivir y ser feliz, concentrarse en el aquí ahora, tipo zen. Y dejar que pasen las cosas. Obviamente entre el blanco y el negro hay muchos tonos de gris. Las coincidencias te ayudan a decidir, a relajarte en el flujo de la vida. 

Ah, por cierto, a ver si coincidimos....... un ratito en un recodo del camino. No sé si tendremos que esperar a encontrarnos casualmente..... ¿Y si nos llamamos?


Bsss.
Alz.



miércoles

No quiero oirte más



¡Déjame hablar!

NO

Estoy saturado de todo. 


De trabajo. De problemas. De crisis. De tareas. De política. De familia. 


No me vengas con malos rollos. No quiero oirte. Cierra el pico ya.


(Salgamos a dar una vuelta)





Foto: compartida en facebook ¡qué buena!







sábado

La pintura y la regata








Comenzamos un nuevo proceso. De nuevo en el camino. La música que me inspira es On the road again. Woodstock, 1969. Una delicia vintage. Cada vez que comienzo algo nuevo me asaltan unos sentimientos muy especiales. Como quien comienza una nueva regata y le falta todo para llegar a la meta, no sabe si la alcanzará. Una nueva pintura, como la que ilustra este post. Verla comenzar por apenas unas líneas de lápiz que marcan la línea del horizonte, la silueta de los cabos y entrantes de la costa, y sin embargo, ser extremadamente meticuloso con las distancias, con las proporciones, con observar una silueta que habrá de ser perfectamente reconocible, exacta como en la carta náutica. Después, verlo transformarse cada día que pasa. Teñimos de gris o teñimos de azul. Un día luce el sol, pero al día siguiente las olas y el viento te dificultan enormemente la singladura. Observar el proceso. No ha sido tan divertido como imaginamos al principio. Hubo muchas dificultades, la naturaleza se alió para darnos caña, nuestros cuerpos se dejaron vapulear, respondían según lo previsible echando la hiel por la boca.  Desde tierra mirar, ver cómo se adquieren los tonos originales del momento mágico en que fotografié la naturaleza espléndida del alba un día de primavera. En el mar, la lucha de los trapos a favor de los elementos era encarnizada. Cerrar el cerebro por vacaciones un rato. Contener la respiración desde la costa. Darle largas al raciocinio. Entregarse al color. Al oleaje. Al viento. Atrás quedó la última aventura, la última incursión en lo desconocido. Cada vez es nuevo. Cada vez es diferente. El aprendizaje incorporado a mis vivencias. Ha dado comienzo otra nueva aventura. Otro nuevo paso, y avanzando millas.


Licencia de Creative Commons


Banda sonora:








PD: Enhorabuena a los vencedores.  Lo celebramos juntos.




jueves

Me vas a odiar por esto




Quizá tú. Él. O ella. Pero a mí me da igual. Ódiame, sí, no creas que me importa; al revés, me halaga. Antes lo hacías igual o tal vez más, pero lo callabas ante mí y disimulabas ante mis allegados. Hacías como que me respetabas, como que me querías, Y yo me lo creía todo porque yo sí creía, yo sí quería. Por fin voy a hablar. Necesitaba creerte. Eras mi droga como decía la canción de Roxy Music, ¿recuerdas? Hasta que me deshabituaron de tí. Sí, has leído bien; necesité ayuda, yo sola no podía, pero la obtuve. Soy como soy y no me importa si te gusta o no. Me da igual quien seas. Hoy no tienes cara para mí porque esta carta tiene muchos destinatarios.Tú sólo eres uno de ellos.


A partir de mi rehab, soy más yo que nunca y ya puedes hacerlo a cara descubierta. Dime y dí a todo el mundo que no me quieres, que me odias, que me temes. Que discrepas abiertamente, que me combates, que me quieres destruir. Que me quisieras hasta ver muerta. Dílo. Ahora no te atreves a que todo el mundo sepa lo cruel que eres, la mezquindad que anida en tu mente. Mi yo se ayer se doblegó ante las humillaciones, ante las manipulaciones. Mi yo que soy hoy se defenderá ante los ataques como antes no hice ante los golpes de tu mano y los huracanes de tu boca. Curé mis heridas, y no sólo las de mi cuerpo sino las que más duelen, las impartidas por quien amas, por quien confías, por quien debe cuidar de tí. Como antes tú. Cuando se me cayó la venda de los ojos me faltaron los pañuelos para secarlos. 


¿Sabes qué he aprendido? Que quien no te ama te daña, quizá por simple maldad, y eso es fácil de soportar. No esperas beneficio de quien no te conoce o de quien no te aprecia, no esperas nada bueno de tus enemigos. Pero... ¿Te daña quien te ama? Pues sí, sin duda alguna. Esto es lo más difícil de aceptar. Quien dice quererte te quiere a su manera, y es capaz de hacerte mucho daño, consciente o inconscientemente. Y esto sucede por múltiples razones que pertenecen a una psique que no es la tuya. Sus desequilibrios mentales o sus neuras no tienen nada que ver contigo. No es mi culpa, no es que me lo merezca, ahora ya lo claro. 


Qué pena me doy de la mí misma de entonces. Hasta que alguien me dijo: Tienes que contarlo todo, decir lo que te pasa y lo que estás sufriendo. Confía en alguien. En tus amigas, en tu madre, en tu hijas, en tus sobrinas, en tu familia. No es ninguna vergüenza lo que te está pasando. Hay muchas personas dispuestas a escucharte. Hay muchas personas que hacen de ayudarte su trabajo. Ya han escuchado a otras, saben qué hacer. Pero basta de lamentaciones, esto fue ayer.


A partir de ahora yo contratacaré porque me dará la gana. Hay medios para protegerme, para parar el daño y el miedo aunque deba pedir ayuda. Sólamente porque deba hacerlo, porque me apetezca. Para sentirme restituida de tanto daño, vengada.  Como antes tú a mí, sin motivo, yo a tí como si no te hubiera perdonado todavía, como si me vengase.  Dice la religión que eso no es bueno. Que perdone y que ponga la otra mejilla. Bravo. Eso sirve para restaurar la paz social, el amor fraterno, pacificar los pueblos, pero a mí eso ahora no me sirve. Yo quiero restaurar la paz en mi casa y eso pasa por que tú te vayas.


Vamos a comenzar aceptando que soy un ser humano con mis fortalezas y debilidades, virtudes y defectos, bondades y maldades. Reconozco que tengo una luz y que tengo una sombra. Una gran, fuerte y preciosa parte oscura. Sé que hay cosas mías que no te gustaban, que he querido ocultar de tus ojos para hacerme más buena ante tí y me quisieras, pero que seguramente ya habrás descubierto, y me han hecho peor a tus ojos y te ha dado pie para la manipulación y para el castigo. Las niñas buenas también reciben los azotes. Soy como soy. Lo que no me gusta de tí también forma parte del mí que me niego a ver porque te lo proyecto. Esto es lo que has hecho. Y lo que criticas en mí dice de tí, no de mí.


He aprendido y sé más que ayer. Pero soy tan yo, más yo que antes, que era medio yo solamente y medio tonta además. Al menos me siento más completamente yo. Te he dado una patada por el culo para que me dejes en paz y me he quedado tan fresca. Era tan buena chica, tan íntegra, tan desgraciada. Soy más feliz  sacando a pasear la parte de mí menos buena, más real y más auténtica. Una parte dentro de mí de chica mala, mala reprimida, mala dominada. Me acepto así,  me gusto como soy.

Tú sabes que no soy una buena chica. Pero que cuando soy mala soy más guapa.


Licencia de Creative Commons










You know I'm not good, Amy Winehouse en su plenitud.

Di no al maltrato psicológico.





martes

Vamos viendo resultados....



















Este post es continuación del post dedicado al manchado de marzo. Ya veis como las chicas han ido empastando y ajustándose a la tonalidad del modelo, cada una con su estilo personal. Todas las pinturas, excepto una que es acrílico, están realizadas al óleo. Faltan solamente los toques finales, por ejemplo, algunos golpes de luz, que cada cual dará en casa. 

Qué resaltaría del aprendizaje de estas sesiones, uf, hay muchas cosas, seguramente que hay que dejar de pintar con el cerebro para comenzar a pintar con los ojos. Eso quiere decir dejar de interpretar -usando la materia gris- para ver simplemente. Y bueno, han habido bromas y algunas otras frases memorables que ahora no quiero acordarme pero que las sacaré cuando vengan a cuento. 

La última foto, una panorámica parcial del estudio.  Este curso no haremos más pinturas al unísono. A partir de ahora cada cual trabajará en sus propios motivos, a su manera, incorporando a su pintura todo lo aprendido e igualmente importante, todo lo desaprendido, los malos hábitos corregidos. O al menos eso es lo que se pretende.