domingo

Por cojones



A mis órdenes. Te impongo mi voluntad y desprecio la tuya. A veces lo diré, pero siempre te voy a pedir que lo adivines. Tú eres débil y estás a mi llamada, no entiendes nada. Calla. Hágase como yo digo. Ven ahora sí y ahora no, perra. Me apetece jugar contigo, porque así te domino. Sométete a mis designios y cuando te maldiga, te use y te eche llora, si quieres, te hará más mujer. Acéptalo, serás más feliz aceptando el sufrimiento. Yo mando y tú obedeces. Tú quieres pero por eso mismo yo digo que no y extiendo mi dominio a todos los ámbitos de tí que te atrevas a mostrar. Si me desobedeces te castigaré con creces. Te haré pagar todo el daño que otros me hicieron a mí. Sea lo que yo diga, haremos lo que yo quiera, tú no cuentas. Me das rabia, envidia, desprecio. Eres sólo una cosa que está a mi servicio. No eres suficientemente buena para mí. Tu opinión si tienes no me importa. Sólo mi opción es la válida, la tuya no vale una mierda. Ni sé cuál es, pero no me importa. Mi visión del mundo es la correcta, nada me hará cambiar, tú estás equivocada. Pobre de tí si me disturbas. Ni se te ocurra sacar el corazón de ese par de tetas. Tú albergas y me despiertas emociones que a mí me sorprenden y me atemorizan, pero no lo voy a confesar jamás. No quiero escucharlas, ni menos sentirlas. En mi vida no caben los sentimientos, yo soy sólo mis pensamientos y aquéllo que creo controlar. Persigo mi propia quimera. Y tú eres sólo un coño para ser usado. No es preciso ser más sutil. Aunque me equivoque y aunque te haga daño nunca te pediré perdón. Si yerro o si sufro nadie lo sabrá jamás, y menos tú. Nunca me aquietaré a tí. En mi trono se está solo y es agradable someterte. Bésame los pies, pero no me toques los cojones.  








(Tacha lo que no hayas sentido.)




Alz.



Licencia de Creative Commons

jueves

Gratitud














¿Puedes hacer algo por conseguir tu deseo?

¿Sí? Pues pasa a la acción.

¿No? Pues deja de tener el deseo.


Agradece lo que tienes.








ALz.

Óleo sobre tela. fragmento.





Licencia de Creative Commons






viernes

Suerte, sueño o engaño



No doy crédito; el árbol de navidad de Sol, lugar principal, más visto y codiciado de la capital del reino es un elemento publicitario de la Sociedad estatal de loterías y apuestas del Estado. Radiante monumento al trasvase voluntario de miles de millones de euros a las arcas del Estado, convenientemente disfrazado de … ¿ilusión? Creer en una posibilidad más remota que la de que te caiga un rayo encima cuando sales a la calle…(qué ilu) ¿qué es? ¿Suerte, sueño o engaño? Y creo que a la calle salimos todos muy seguros de que no ocurrirá esto. ¿Qué somos? ¿Ilusionarios, desilusionados ó ilusos? ¿A qué jugamos?

A una milagrosa coincidencia temporal acausal entre la bola y tú que se llama probabilidad uno entre ciento veinte mil, que es la cantidad de números a la venta, multiplicado por ciento ochenta, que es el número de series o de veces que repiten el número, y luego todavía multiplicado por diez, lo que nos dará el número de papeletas o décimos. Saca la calculadora. Cada número vale treinta y seis mil euros y el gordo es de cuatro millones.

Uno dividido entre doscientos dieciséis millones es la mísera probabilidad de que toquen los cuatrocientos mil al décimo, si no me equivoco al hacer las cuentas, porque estos números ya marean. De tu inversión, el ochenta y cinco por ciento de las veces lo perderás todo, el diez recuperarás el dinero y el cinco ganarás algún euro de consolación. Con eso sí puedes contar, o con que te parta un rayo; con que te toque el gordo, no.

El éxito de venta de las campañas se aprovecha de las relaciones sociales y del sentimiento de grupo, del fruto de la costumbre, de la paga extra, de la cultura de la escasez o ya directamente precariedad pero del despilfarro navideño y sobre todo del marketing, que eleva a la categoría de sueños un producto publicitario. A la gente no le duele gastarse la pasta en Navidad, y para que esto pase con su producto, invierten sumas ingentes y utilizan a artistas reconocidos y respetados para que presten su imagen. Los medios dan cobertura informativa abundante del antes, durante y después de los sorteos, incluidos el reparto de premios y los soporíferos brindis durante todo el día y en todos los canales.

Hagamos más números. Del décimo que tu compras, el treinta por ciento va a gastos de administración y otras mandangas, directamente al Estado. Que este año ha anunciado que incrementará su cuota un diez por ciento. O sea, que en 2013 se quedan un cuarenta por ciento directamente. En teoría quedan el sesenta por ciento para premios, pero no es verdad.

En caso de que te toque una cantidad apreciable, (por encima de los dos mil quinientos euros) tendrás que pagar un veinte por ciento a Hacienda, porque acaban de crear un impuesto especial. O sea, hasta aquí podemos decir que queda el cuarenta por ciento para repartir en premios, y lo que es lo mismo, que el Estado se queda directamente con el sesenta por ciento de lo ingresado.

Pero no es verdad. En el supuesto que te toque, te vas a gastar el dinero del premio o buena parte de él en compras. Los impuestos no quedan aquí, suma un veintiún por ciento del importe de los artículos que te compres con el dinero obtenido. ¡Toma! Un ochenta y un por ciento directamente a las arcas del Estado.

Si quieres hay más, como inviertas en ladrillo, te esperan plusvalías, ibis y otras mandangas. Alguien que vaya haciendo cuentas, pues entre el impuesto sobre la renta, el incremento patrimonial, y el impuesto sobre el consumo, a mí los números no me salen. ¿Y a tí?

No juego, claro, pero no voy a decirte que no lo hagas; si después de saber que sólo una de cada doscientos dieciséis millones de veces te puede tocar, y que de cada veinte euros que pagas por un décimo, más de dieciséis se van ipso facto en impuestos y conceptos afines, todavía juegas, allá tú.

Yo no lo haría porque pago ya demasiados impuestos de forma obligatoria, como para regalar mi dinero voluntariamente al estado, aunque me lo pida la Caballé y toda la jerarquía de rodillas. Incentivan lo que es un negocio redondo y jugoso para ellos y ruinoso para nosotros. Ya pueden contratar a los mejores para engatusarnos, que les sale muy a cuenta. Como en todos los juegos, la banca siempre gana; pero ésta, más.

Verdades de Navidad. Haced por ser felices, todo el año.



ALz.


domingo

No me creo







—¿Has podido acabar con él?
—Aún no.
—Avísame cuando lo hagas, para saber qué se siente.



(Quantum of solace)




Alz.




viernes

Rescoldo

















Me dolió tanto que no pude cumplir con mi palabra:
Olvidarme.





ALz.





 Óleo sobre tela, fragmento.

Licencia de Creative Commons


martes

Punto final








Todo lo que un día quise decir lo dejé escrito aquí.










*

Lo que acabe por lo que comience.


*














ALz.
Punto final (prueba superada), Óleo sobre tela, fragmento.


Licencia de Creative Commons




sábado

Llegamos






Si algo tienen los años es que uno acumula pasado.

Lo que pasó.

Tantos "fue" y "fueron" que ya no son.
Y lo que no llegó a ser. 




Y un sólo 

es.





ALz.




Licencia de Creative Commons



jueves

viernes

Rosas



Un día me acerqué a tí.

Me alcanzaste una flor y yo largamente la venía añorando.

La quise tanto.

Fue poca cosa pero a mí me pareció bella. Auténtica.

Un día pinté esta rosa rosa bajo luz amarilla y pensé, para tí mi rosa, toma.

Esa flor fue tan efímera que apenas un soplo de viento y amaneció rota.

No llegaste a acunar la rosa entre tus manos.

Llovió en todas las tierras.


ALz.






Licencia de Creative Commons

Mesa limpia








Gente de agenda, pasto de redes, habitantes del pasado; aquéllos que hace siglos que no me llaman ni les llamo; los que no contaron conmigo para lo bueno, quienes no han tenido nada bello que mostrarme, los que no me invitaron a sus eventos; quienes ofrecieron a otros lo que yo me merecía; los habituales que acuden por interés, quienes sólo se acercan para pedir consejos o favores; quienes me dieron su palabra y no cumplieron; los que no me apoyaron cuando lo necesité; los que no contestaron a mis saludos, quienes jamás celebraron mis creaciones; aquéllos que me envidiaron, los que me juzgaron, quienes me criticaron; los que no osaron defenderme cuando lo precisé, los cobardes.

Quienes me fallaron, los que un día me hirieron, los que me ofendieron; los que se fueron sin decir adiós; los que no me quisieron bien, los que persistieron en el daño; los que un día ya no me conocieron; quienes no tuvieron una palabra amable, aquéllos que no compartieron mis bromas, ni mis risas, ni mis llantos; los que se jactaron pero nunca fueron mis amigos; los que disimulan, los hipócritas; los que estuvieron a lo bueno y desaparecieron en lo malo. 

Aquí ando con el guardapolvo y el plumero en una mano, las gafas en la punta de la nariz, y el dedo índice de puntero, esta sí, este no, este tampoco; en eso llevo todo el mes. Haciendo mesa limpia. Plis, plás. Al reino del olvido. Tú también. Adiós. 

A la papelera, sin acritud. He trabajado duro e implacable, para mí. He quitado telerañas, polvos, lastres, plastas. Y me siento muuucho más ligera, esbelta and cute. Y por supuesto, sin marido.


ALz.



Licencia de Creative Commons

viernes

Por mis muertos




Por su amor, por su consejo, por la guía que me han prestado y que me acompañará siempre. Por ellos, por los antiguos linajes que ostento y por la sabiduría que me legaron.

Por la luz que me ilumina y por la fuerza que me alienta. Por honrarles miraré lejos, apuntaré alto y me encomendaré al cielo y al universo.

Por esta persona criada con orgullo bajo su tutela, en altos valores, con mis palabras y mis rasgos que son los de mis ancestros.

Va por vosotros, que pervivís en mi memoria y habéis sido perpetuados en el núcleo de mi ser. Va por mí, que aún me queda por hacer aquí. Va por quien de mí desciende y me sucede.

Dadme fuerzas, he de seguir adelante con coraje, caminando, sin detenerme, sin mirar atrás.

¡Brindemos!

Alz.





Imagen: La Transformación, fragmento. Óleo sobre lienzo.

(Y la calabaza de mi casa.)


miércoles

Precario






Así vivimos. Sin ser conscientes de ello, pendemos de un hilo. Un soplo de viento y todo se viene abajo.

Poblamos la Tierra en precario, y en cualquier momento podemos ser expulsados del que creímos nuestro paraíso.







Fragmento. Acrílico sobre papel, 1997.

ALz.


sábado

Gota












Gota tras gota llega pronto



 la gota que colma el vaso 




cuando el vaso está casi lleno.







ALz.

(foto en Karlovy Vary)


lunes

Sin vergüenza




Vamos, vamos; saliendo a la calle.

Hay que dejarse ver como se es y lo que se hace. 


sábado

El poder del mal







¡¡¡Chof!!!
Envueltos por las malas noticias, por hechos luctuosos, sanguinolentos, por los fracasos y los desgastes de la vida.


¿Sería acaso mejor que todo fuera sobre ruedas? ¿La vida fácil?


definitivamente,
NO


Lo mejor de que todo se rompa es que, si cae bien, 
tiene su utilidad o tiene su estética.


¿Cómo?
 ¿Me lo repite?


Vale. Ven.


Alz.






Foto: Arco 2013.

jueves

Llamo






Ábreme esa puerta que da a tu casa y deja que me siente en ella. 



Conversemos.

Callémonos. 

Mirémonos.

Perdonémonos.

Abracémonos.

Digámonos adiós.





ALz.


miércoles

Irse sin decir adiós








Hace unos años que nos conocíamos y nos caíamos bien. Hablábamos, comentábamos, reíamos, jugábamos, nunca discutíamos y jamás lloramos.

Hace unos días que nos conocimos y nos caímos bien. Hablamos, comentamos, reímos, jugamos, no discutimos, ni lloramos. 

Pudo haberlo hecho pero eligió no hacerlo. Se fue sin decir adiós. No me contestó porque no quiso hacerlo. Como si así, no se hubiera ido. Como si así, nunca hubiera existido.

ALz.


martes

Love and death











WHAT time the mighty moon was gathering light

Love paced the thymy plots of Paradise,

Ad all about him roll'd his lustrous eyes;

When, turning round a cassia, full in view,

Death, walking all alone beneath a yew,

And talking to himself, first met his sight:

"you must begone," said Death, "these walks are mine."

Love wept and spread his sheeny vans for flight:

Yet ere he parted said, "this hour is thine:

Thou art the shadow of life, and as the tree

Stands in the sun and shadows all beneath,

So in the light of great eternity

Life eminent creates the shade of death:

The shadow passeth when the tree shall fall,

But I shall reign forever over all."



A. Tennyson.





No hay amor que esté solo ni que acabe en la muerte.


A Gala.

sábado

Mal y normal





No es normal instalarse en el negro. Te acostumbraste a que te traten con la punta del pie. Ya casi te parece normal que te hagan desprecio. Sabe que no lo es, sabe que hace mal y sabe que te duele. (Culpa consciente) Piensa que las personas mientras peor las tratan peor se dejan tratar. (Buscando tus límites) Que hay quien anda a palos, como las reses. O sea, tú. ¡Si será bestia!

Y... ¿sabes? de alguna forma siente que incrementa su poder y disfruta al comportarse contigo como un animal. Un día bien y diez días mal, según le roten... las ganas. Pero tu ni lo más mínimo, aunque no se te oiga ni piar. (Se abre en ti la brecha del dolor y del desprecio, en silencio) ¿Si te callas consientes? No. Percibes que cada cual es como es y no servirá de nada que muestres reprobación u opongas resistencia, porque nada cambiará. Cuando hablas es para calmarlo, yo te he oído. Sólo que el respeto y el aprecio se disuelve. Y no vuelve.

La vida es lo que tiene, esto es lo que hay. Aceptas menos de lo que mereces por lo que das. Recibes todo con una media sonrisa y la apariencia de que no va contigo. Pero sí va. La completa la reservas para tí y para quien se sitúe a tu nivel, a quien le darás todo sin reservas: la entrega. Aunque es posible que el amor no vuelva jamás; pero qué bonito sería.

¿Qué te queda, seguir soñando? No te quedes aquí. No busca nada nuevo quien le queda algo. Pero es que para tener eso, mejor es no tener nada, nada, ná de ná. ¿Comprendes?

Date media vuelta y acaba con esto. Vete antes de que se agote tu resistencia o se acaben tus fuerzas. Aquél te dijo que no sabe cómo puedes tardar tanto. Te hirió, pero era cierto, estás tardando demasiado. Nadie sabe lo difícil que fue. Duele, pero nadie se ha muerto de esto. Rompe, vete y olvídalo, ahora que todavía puedes. O enfréntalo de una vez y denuncia. Renunciar a ciertas cosas para recuperar la libertad es normal. No lo es sentirse mal. Estar mal no es normal.




ALz.







Licencia de Creative Commons








miércoles

Vuela






A tí que no sé cuán lejos estás y sin embargo te hablo,  te escribo y te pienso, todos los días. ¿Acabas de pasar?

Hoy casi me lleva el viento. Pero me da igual, y no me resisto, y me gusta; veo las gaviotas dejarse llevar, jugar. Volar. Volar al este y más allá, más al este y planear, y volver a pasar ante mis ojos envidiosos, anhelantes de libertad, de sol, de luz, y de paz. Y ponen luego rumbo al oeste y llegan lejos, muy lejos, y allá donde se agota la corriente dan media vuelta y planean, de regreso, tierra adentro, ante mi paso. Hoy sé que me amo.

Ellas. Juegan en el aire, danzan en el viento. La expresión más bella, la viva imagen de la libertad, para mí tiene forma de ave blanca que vuela. Sus alas largas se curvan y se extienden, ante este ocaso que yo te dedico a tí.

Y así lo hago, porque en tí pienso,  mientras observo las nubes como costillas blancas sobre un cielo azul intenso. Y en el horizonte, ya amarillean los grises, que yo espero, para disfrutar de este momento. Y cuando el cielo se ponga naranja me pondré inevitablemente a fotografiarlo, atesorando imágenes del ocaso, la belleza extrema de esta tarde de tormenta.

No quisiera parecerte cursi, porque es así exactamente como lo siento y lo voy dictando; extrañamente asombrada ante este cielo que se me viene encima y cobra vida, luz y rosas por momentos. Sigo leyendo.


ALz.

miércoles

Sólo sé que no sé











... nada. Nada filosófico, y apenas nada en lo real. No lo creo.

Quizá no sabes qué sabes ni cuánto sabes. El conocimiento vive enjaulado tras el cráneo de la mente. Lo material y lo inmaterial se funden en las mismas estructuras.

El saber se halla reposando. Inaccesible en ocasiones, como flores tras una valla. Pero están, aunque no las puedas alcanzar sin abrir la puerta.

Lo que sucede es que en ocasiones no puedes acceder a todo lo que sabes. Es lo que sucede con el olvido.

-Si sé, ¿cómo es que no sé lo que sé? (A veces no quiero saber)


¡Para nada! Sí sabes. Sabes que lo sabes, aunque no sepas qué sabes.

Haz memoria.

Sabes más de lo que crees saber.




ALz.


Ver sin ser visto








Les veo escuchar,

mirar,

observar.

Sé que soy el objetivo hoy.

Escuchad, mirad, observad.


Mañana si eso, nos vemos, y hablamos.




ALz.

lunes

No hagas aprecio






En ocasiones se nos mete alguien en la cabeza y nuestros pensamientos le persiguen. Por su belleza, o el placer, que aspiramos poseer o alcanzar. Por el daño que nos hizo, y que no podemos todavía olvidar. Por una cualidad que deseamos, le atribuimos y proyectamos.

Nuestra intuición nos da cuenta en muy escaso tiempo del rechazo. En unos pocos minutos, percibe que no le caes bien a alguien; que no te es receptivo; que no eres bien recibido; que no le gustas; que no te desea; que no está por tí. Que la respuesta que te está dando no es favorable ni la esperada. Que sus palabras no hieren, pero duelen. Sin embargo, No hablan las palabras; habla un cuerpo y el otro cuerpo entiende.

Insistimos porque aprendimos a perseguir quimeras e imposibles. Nos gustan los retos y soñamos que la vida es como una comedia americana, feliz al final. Pensamos que sólo depende de nuestra perseverancia el triunfo, de nuestra actitud que nos acepten, nos quieran, nos deseen o nos respeten; de nuestros desvelos que tal persona recapacite, cambie y se avenga a lo nuestro.

Pero no es así y nosotros no conocemos las razones ajenas, conscientes e inconscientes, ni podemos aspirar a dominar más mente que la propia ni más cuerpo que el que somos. Se dice que no debes perder el tiempo tratando con prioridad a quien te tiene como opción, y yo añado, o como felpudo.

No le des una segunda oportunidad a la humillación. No dediques ni un minuto de tu tiempo a quien te perjudica, ni a un pobre desgraciado que va de cabrón por la vida, contigo. No hagas aprecio a quien hace de tí desprecio. Y este es un consejo que te doy, amiga mía.



ALz.








martes

Hasta siempre









Me tuve que dar cuenta 

de cuanto te apreciaba

por lo mucho que me duele 

que te hayas ido.







ALz.

sábado

Ser o estar







Las cosas son como son.

No como queremos que sean.

Ni siquiera como aparentan ser.




Aceptar que lo que es, es.

y

Que se es, como se es.




Facilita ver lo que Es.